Edmundo Moreau |
Edmundo Moreau (Moró), trabajó en la película "Gallo de mi Galpón" con Gloria Travesí que fue la dama protagonista de esa producción de "Amauta Films" allá por 1938. Era el comediante fino y de personalidad propiamente diseñada para hacer reír. Bajo de estatura, delgado y con una picardía en los ojos, digna de ser captada por las cámaras cinematográficas. En la radio daba vida a personajes diversos siempre ceñido a un libreto, al que daba forma y creando el tipo adecuado.
Alternaba en los escenario del teatro y la radio, con otras no menos famosas figuras: el cómico Francisco "Paco" Andreu", Alejandro "Alex" Valle, Carlos "el cholo" Revolledo y Antonia Puro, que se confundían en hilarantes comedias teatrales de grandes autores de la literatura. No se conocía la caricatura obscena que practica la mayoría de "imitadores" de la actual televisión y radios de Lima. Era pura comedia y jamás se atentó contra el honor, ni hubo burla de la desgracia ajena.
Zarela Cruzado y Edmundo Moreau en "Los Novios". |
En 1954 tuve el honor de trabajar al lado de Edmundo Moreau. Pisé por primera vez el auditorio de Radio "Victoria" y con Delia Fortún, Zarela Cruzado y el gran comediante Moreau, dimos vida a "Los Novios", con el libreto nada menos que de "Pedrín Chispa" (Elías Ponce padre), escritor de gran calibre sin parangón alguno. Luego de la actuación, solíamos retirarnos a un restaurante cercano y, con su gran sencillez de artista, me permitía toda clase de preguntas y curiosidades propias de mi edad.
Lo importante es rescatar del olvido a una figura magistral de la comedia teatral. Posaba para las revistas y diarios y siempre era objeto de entrevistas que elogiaban su actuación. Tenía un dejo y matiz propio en la voz que lo hacían inconfundible. Fue un personaje histórico y, gracias a Dios, esta maravilla moderna de la cibernética, nos da la ocasión de inmortalizarlo. Para "DON EDMUNDO MOREAU", actor y comediante de alto nivel, mi homenaje y en la Gloria está, divirtiendo a los ángeles. Gracias.
Tuve la suerte de escuchar a Edmundo Moreu en la radio. Y lo primero que llamò mi atenciòn, fue su voz, como Ud dice, tenia un matiz muy propio, pareciera que hablaba como si estuviera con un fuerte resfriado. Lo que se conoce tambien como voz nasal. Una voz que hizo de la comedia un arte, compartido con el "Cholo Revolledo", Antonia Puro, Alex Valle, Lucho Còrdova, Olvido Leguia Paco Andreu, Zulma Viola, Carlos Rodrigo,etc, etc. Un humor fino, lleno de situaciones graciosas, donde la risa que provocaban aquellos comediantes, era brotada del arte que ellos irradiaban. Ese humor fino, ese dominio de escena, y sobre todo ese respeto al publico, y la disciplina al ceñirse a los libretos muy bien estudiados, hicieron de Don Edmundo y la plèyade de sus famosos compañeros de arte, sean los favoritos la gente de los años 40' y los 50'. Llevar libretos de Don Pedrin Chispa que fue indudablemente un genio, debiò ser heroico en aquellos tiempos. Y lo afirmo porque aquellos micròfonos tanto de pedestal como los famosos "cuellos de ganso", que eran con membranas de cristal y carbòn, no tenian la sensibilidad de los dinàmicos, electro dinàmicos,y los modernisimos omnidireccionales que se usan ahora. En aquellos heroicos años 40' se trabajaba con toda el alma corazòn y vida, poniendo los artistas todo su arte histrionico. Y con aquellas consolas a tubos(vàlvulas electrònicas) que hacian que la cabina parezca un horno por el calor que disipaban, los tornamesas para discos de 3 velocidades, las màquinas grabadoras de acetatos marca Rca Victor que servian para grabar la publicidad. Con todas esas limitaciones propias de la època, estos genios de la comicidad nos hicieron soñar. He alli la magia impactante de la radio, nos permitia imaginar y formar nuestro propio mundo de ilusiòn. Amigo Servàn, ojalà hubieran mas personas como Ud, que esta rescatando lo que fue la època dorada de la radio. Un abrazo.
ResponderEliminarSiendo niño conocí al actor, cuando acompañaba a mi mamá al Mercado Central. Cuando él transitaba por la calle (plazuela de Santa Catalina) con su esposa, mi mamá y los transeúntes lo saludaban y él contestaba muy serio, distante y con fina cortesía. Vivía en Mesa Redonda, siempre lo veíamos de terno plomo y sus zapatos con tacos aperillados.
EliminarY tu me ayudas mi querido OLDIES.
ResponderEliminarAquí leyéndole a mi suegro, Roberto Herrera Moreau sobre su tío abuelo. Muchas gracias por tanto.
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