"EMILIO PELÁEZ MONTERO". EL COMPOSITOR ROMÁNTICO OLVIDADO.

Emilio Peláez
Montero

Emilio Peláez Montero fue un compositor de grandes éxitos discográficos. Lo conocí en mi época radial de "Victoria" y tuvo grabaciones muy populares, en especial su vals "Triste Despedida" que cantara con gran éxito Maritza Rodríguez. De carácter algo difícil, lo que se dice, desposeído de sangre ligera. Sin embargo, en esos años 50, tuvimos una relación cordial pero, casi siempre, se le veía contrariado y con pocos deseos de comunicación. Diría que tenía sentimientos encontrados.

Muchos exitosos intérpretes de moda, le cantaban sus composiciones. "María Magdalena" es un vals que denotaba su estado de romanticismo y era una declaratoria sincera a la mujer amada. La versión de Jesús Vásquez, en una grabación muy bien lograda, hizo que se convirtiera en éxito y hasta hoy podemos oirla en los espacios dedicados a nuestra música. Quisiera cambiar mi opinión sobre Emilio pero, quién sabe qué problemas cargaba por aquellos tiempos el gran Peláez Montero.

El vals "No me odies", quizá fue un reflejo de su existencia. "No me odies tanto te lo pido, que acabaré por creer que tu siempre me has querido; más, despechada por que nunca, te di yo importancia alguna me aborreces con pasión". Y agregaría en otra estrofa: "A todas tus amigas les andas diciendo que soy un canalla; y tu como eres buena, ganarás el cielo y tendrás medallas". Muy buena letra y mejor música para hacer un reproche. Lo grabó con gran éxito Luis Abanto Morales.

Hizo "Triste  Despedida".

Verlo sonreir a plenitud era una suerte. Disconforme con los colegas del micrófono que no anunciaban sus discos y peor aún, insatisfecho con los cantantes que no incluían sus temas en sus actuaciones radiales. Lo aconsejaba para que tuviera paciencia y es que no se daba cuenta que sus valses eran notables. Fueron muy populares y siguen en el gusto de nuestro pueblo. Por los años 60 llegó a un acuerdo con Radio Luz para realizar una audición propia. Duró muy poco. Terminó de malas maneras.

Sin embargo y pocos lo saben, la polca ¡Ay mira, como me mira!. es de su inspiración y lo pinta presuntuoso porque comenta: "¡Ay mira, como me mira esa chiquilla de su balcón; que de tanto mirarme se está metiendo en mi corazón!"... Es su lado escondido y es así, alegre y picarón como nos hubiera gustado verlo siempre. Lo aprecié y lo comprendí. Era un poco su protesta a la vida y un renegar por las diferencias sociales. Emilio Peláez Montero, fue un compositor al que todos cantaron sus temas.

Las últimas veces que lo vi. estaba dedicado al negocio herbolario. Recetaba fórmulas curativas y caminaba con su esposa, una agradable señora invidente e inspiradora de su vals "Aurorita". Tenía problemas de salud y su andar era con dificultad. No hizo abandono de la música, pero ya vivíamos otros tiempos. Dejó este mundo pero triunfó al lado de Oré Lara,  Félix Pasache, Clemente Reynoso, Lucho Dean y otros que sería largo enumerar. Tuvo muchos temas y los que hemos mostrado, son una muestra de su gran talento. Gracias.

Nota.- En base a datos de comentarios llegados, hemos dedicado una segunda parte a este gran compositor peruano, siempre en "Artistas en el Perú". Fecha 27 de Agosto 2010.